Un histórico concierto que transcendió fronteras durante y después
de su realización. Programado para el 11 de septiembre de 1971, como una
carrera de autos en valle de bravo, se propuso hacer una “fiesta mexicana”
donde iban a tocar 1 o 2 bandas a lo mucho. En ese entonces el rock, en la ciudad
tenía una gran demanda por los jóvenes de todas las clases sociales, y los máximos
exponentes eran dug dugs, Javier batiz, three souls in my mind, entre otros.
Los organizadores preparando las contrataciones con las bandas, confirmaron 12
bandas para tocar en el festival. Pero no se imaginaron que un día antes llegarían
todos los jóvenes para disfrutar de este concierto, llegando a cifras
imaginables de 300 mil asistentes.
En ese entonces todavía se tenía fresca la memoria de los
hechos que habían ocurrido en la plaza de las 3 culturas en Tlatelolco, (2 de
octubre del 1968) y unos meses atrás el halconazo en el casco de santo tomas, (10
de junio 1971). Y los principales represores Gustavo Díaz Ordaz y Luis Echeverría.
Y después encontrarse a un ejército de 300 mil jóvenes,
gritando en el concierto “tenemos el poder”, hacia temblar a toda la esfera política, el
gobierno empezó a tener miedo, del
contingente que estaba concentrándose, porque el concepto del rock lo relacionaban
con: alteración de las conductas, drogadictos, pandillerismo etc.
Aquel día no hubo ni
un solo problema, era puro amor y paz, pero los medios de comunicación satanizaron
el festival y hubo una gran represión en la música, los foros que tenían para
hacer sus tocadas desaparecieron, ser prohibió el rock en la ciudad y todo esto
dando paso a la creación de los hoyos funkys.
Pero avandaro quedara guardado en la memoria de nuestros
padres y abuelos como la primera gran concentración de jóvenes unidos por un
gran ideal la música.
Voz en resistencia